Puño y Letra

Robo a la Vista de Todos; PROFECO Instancia Federal Incompetente

     

 

Nezahualcóyotl, Méx.- “Kilos” de 700, 800 y de 900 gramos es lo que adquiere una persona al comprar en tianguis, mercados, locales comerciales y en tortillerías en los municipios de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México al adquirir artículos de la canasta básica, ello ante la falta de inspectores de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), denunció la representante de la Sociedad Civil, Comerciantes y Profesionistas del Estado de México (SOCICOPEM), Mónica Ramos Santana.
Detalló que ante la falta de personal de la PROFECO para que revise las básculas en los tianguis, mercados públicos, tortillerías, tiendas de abarrotes y otros negocios en municipios como Nezahualcóyotl, La Paz, Chimalhuacán, San Vicente Chicoloapan y otros ha propiciado que los encargados y dueños de los negocios se den a la tarea de engañar a la gente que en lugar de dar un kilógramo de cualquier producto, entreguen 300, 200 ó 100 gramos menos en lo que pesan.
“En los mercados sobre ruedas o tianguis los comerciantes ofertan productos de 5 kilos y solo entregan hasta 4 kilos, es decir un kilógramo menos lo cual les ha redituado grandes cantidades de ganancias”, afirmó Mónica Reyes.
Es frecuente observar cómo la gente pese a que se da cuenta del “robo” sigue adquiriendo los artículos, ello porque compran los productos de primera necesidad y por no querer regresar o ir a otro lugar.
Ramos Santana, explicó que ha presentado la queja ante los representantes o líderes de los tianguis y mercados públicos para reclamar, pero estos argumentan que ese asunto no es de su competencia y ellos no pueden sancionar.
“Las básculas están arregladas para que el comprador observe que lo comprado este ´bien pesado´ pero en realidad es un robo frente a todo sin que ninguna autoridad haga algo en torno a estos casos”, detalló.
Cuando acude un inspector de la PROFECO a realizar un recorrido por los municipios siempre acude ante los líderes o representantes de los comerciantes y realizan acuerdos para la colocación de engomados que dicen “verificado por la PROFECO” cuando en realidad nunca revisan las básculas que son alteradas por los mismos vendedores.
Para concluir dijo que mientras no se realicen operativos en los comercios, tianguis y mercados el “robo” seguirá a la vista de todos sin que nadie ponga un freno a esta irregularidad que es permitida por las mismas autoridades.