Puño y Letra

Fraccionadores venden Reserva Ecológica en La Paz

La Paz, Méx.- A cuatro meses para terminar la Administración de La Paz las autoridades otorgan permisos a fraccionadores clandestinos para expender lotes entre 80 y 100 mil pesos en la parte alta de San José, en lo que es conocido como reserva ecológica de la localidad.
Sin servicios de agua potable, drenaje electricidad, sin el trazo de calles los fraccionadores identificados con el nombre de Yesenia Pineda Sánchez y Víctor Contreras Contreras muestran un documento expedido por el Ayuntamiento que les permite fraccionar la parte alta del Cerro, ello entre los límites de Chimalhuacán e Ixtapaluca.
Algunos de los compradores –omiten su nombre- aseguran que han sido timados debido a que les expendieron un lote de 120 metros en el predio denominado Ahuahuatitla, a un costado del predio también irregular el Ahuautle, cabe hacer mención que ambos terrenos colindan también con la reserva ecológica del municipio de La Paz.
El ayuntamiento carece del Comité de Vigilancia para Evitar el Crecimiento Urbano por lo cual los fraccionadores se han dado a la tarea de expender lotes en lo más alto del municipio, por lo cual debe intervenir el gobierno del Estado de México para frenar la mancha urbana que cada día crece más hacia las partes altas de los cerros.
Los sujetos muestran el documento con el aún sello de la Comisión Reguladora del Suelo en el Estado de México (CRESEM) cuando esta ya fue sustituida por el Instituto Mexiquense de la Vivienda Social, por lo cual con ese papel engañan a los compradores de un terreno para construir su vivienda.
Los compradores de un terreno aseguran que exigieron a los fraccionadores les entreguen su terreno ello luego de haber pagado un enganche de 10 mil pesos y tras haber entregado dos mensualidades cada una de 2 mil 500 pesos, pero los sujetos sólo les mostraron un terreno con estacas de colindancia y una calles se abiertas por una retroexcavadora.
Finalmente comentaron que acudieron a la Dirección de Desarrollo Urbano Municipal pero la prepotencia del personal impidió que fueran atendidos bajo el argumento de que el encargado de esa área no se encontraba y nadie podía dar informes o solucionar el problema.